Describirme suena fácil mas sin embargo no podría empezar, supongo que todo va por un «HOLA». Diego es mi nombre y 19 mis años, me gusta la música, bailar y cantar, soñar y aventurarme, escribir leer y sobre todo este mundo lleno de inexplicables historias. Conocer nuevos horizontes y aprender a desaprender todas las falsas creencias que nos profesan e inculcan. Buscar el cambio a lo bueno y entender cada uno de los procesos para no volverlos a transmitir, acabar con la injusticia y la guerra, comprender, comprender, comprender… Caminar y correr, hacer y deshacer, sinfín de cosas que me llevan a crecer, rodearme de almas buenas, pasionales y carnales, amar hasta la locura y tener a la perfecta mujer, sin poseer. Regresar a lo divino, naturalmente ser y volar a lo infinito, lo sublime, lo objetivo. Soy una partícula en vuelo y cambio, con muchas ganas de trascender, ser diferente en un cierto sentido, direccionarme justo donde quiero, fijo metas, vivo cada día, fluyo, soy el mar, el aire, el viento; soy quien quiero ser y más allá de eso cada día soy. Soy amante , enamorado y un poco despistado, apasionado con el arte, alucinado de la noche, cómplice de la luna y uno con la tribuna. Me gusta la elegancia, los valores, la esperanza.
La costumbre, la andanza, la enseñanza. El porte, la fragancia,
la implicancia, importancia, abundancia. Soy alto y delgado, amable y pelado, cabello y ojos castaños. Me gusta vestirme de blanco. Soy simple y relajado, a veces con un carácter pesado, mas sin embargo noble, sincero y un poco osado. Soy amiguero y nada callado, gritón y mal hablado, chistoso y desalmado, me gusta nadar y volar, gozar y soñar.
Describirme no es fácil, ser yo mucho menos, pero toma mi mano y ven te comparto mi mundo, mis aventuras y mis locuras… –Diego De la Torre