Del dicho al hecho hay mucho trecho y es que somos buenísimos para proponernos pero malísimos para cumplir, también tenemos talento para resolver la vida de otros y no la nuestra, y si de consejos se trata sacamos a nuestro psicólogo que llevamos dentro, pero, ¿somos capaces de aplicar en nuestra vida esas sugerencias? ¿o de escucharlas? Nos encanta ayudar y entrometernos en las situaciones ajenas pero poco hacemos por la nuestra. Ahora con el nuevo año estoy proponiendo varias acciones que nos abran la cabeza y nos ayuden a disfrutar cada minuto de nuestro tiempo; Acciones como hacer listas, visitar lugares, meditar y en pocas palabras un profundo autoconocimiento que voy a explicar más adelante.
De metas y propósitos quiero hablar hoy para que reflexionemos sobre lo que estamos pidiendo y atrayendo, sobre cómo lo hacemos y las posibilidades que tenemos para que las cosas que queremos pasen en realidad. En ocasiones necesitamos una buena sacudida para seguir adelante, necesitamos organizarnos para así poder valorar nuestro tiempo. Muchas veces ocupamos de un empujón, una palabra que venga del exterior, algo que nos haga reconsiderar las cosas que estamos haciendo y ver nuestra vida como la más grande aventura de todos los tiempos. Necesitamos de una motivación que despierte en nuestro ser cosas increíbles.
Las motivaciones se pueden plasmar en acciones como el vestirnos bien, pues al menos a mi si la muerte me llega hoy y es verdad lo que he visto en las películas, yo quiero ser un fantasma con un look increíble, o pensar en los espacios que me encuentro, quiero que sean sumamente agradables para que me motiven y me inspiren. Quiero que mi trabajo sea el más extraño pero el más satisfactorio, no importa si estoy en una oficina o si vendo pilas, recuerda que el trabajo dignifica. Que el puesto que tenga me nutra y me llene de vida y que las personas que me rodean pueda ayudarlas y dejar que ellas me compartan su sabiduría. Hay un sin fin de cosas que espero y busco para este nuevo año y ¿cómo las voy a cumplir? ¿qué estoy pidiendo? Tal vez una vida más organizada, nuevas aventuras, seguir en constante movimiento e impulsarme para hacer lo que amo y más me gusta. Los cambios en un nuevo año resultan la mejor experiencia y puedes ayudarte con ciertos elementos para obtenerlos, pienso que no debes sentirte mal por lo que crees que los demás esperan de ti, solo no te traiciones, no te falles y si lo hiciste reconócelo, sigue adelante; Necesitas saber y estar seguro que siempre puedes reinventarte y que todo lo que hagas te dará apertura y crecimiento personal, jamás veas nada demasiado pequeño, el chiste es creer en nosotros mismos, en nuestra increíble capacidad de innovación.
Hay respuestas que se nos presentan todo el tiempo solo hay que estar alertas y tener la mente abierta, a cada quién nos llega ese alumbramiento de diferente manera, por ejemplo yo hoy tuve comunicación con mi ser interno. Mientras estaba sentado en una terraza llena de frondosos árboles y plantas, escuchando el ruido de una construcción vecina, música de fondo de coldplay y las voces de algunas personas también sentadas en el mismo lugar, pensé en mi vida, en las decisiones que había tomado, en los enormes cambios por los que pasaba y en la angustia de sentir cosas distintas a las de siempre. Pensé en lo que estaba haciendo y lo que estaba logrando, en cómo me acercaba a mis pasiones y cómo derribaba mis miedos, en cómo iba a trabajar en las cosas que quiero cambiar y en mi persona. Me sentí sumamente tranquilo. En ese momento pensé que no estaba haciendo las cosas tan mal al final y que solo nosotros tenemos la interminable capacidad para juzgarnos o auto compadecernos, para ser conscientes de nuestros propios procesos, amarnos o aborrecernos, de trabajar en nosotros para poder seguir avanzando y dejar de sabotearnos con alguno de estos destructibles sentimientos.
Me he percatado que en general nunca tenemos tiempo para nada o para decirlo de una manera más certera nunca nos damos el tiempo para hacer esas cosas que amamos y verdaderamente nos apasionan; En ocasiones nos encontramos envueltos en nuestra rutina, en el día a día y no planificamos cada día como un nuevo comienzo, una nueva oportunidad. Es lógico que tengamos que cumplir con ciertas horas de trabajo pero ¿qué hacemos con el tiempo restante? E incluso es importante saber cómo utilizamos nuestro tiempo en el trabajo pues podemos dedicar más amor, más pasión a lo que estamos haciendo. Debemos encontrarnos y sentirnos apasionados con nuestra vida, con lo que hacemos, ver todo lo que nos sucede como una gran oportunidad y no estar atrapados en la monotonía diaria. No permitirnos ser como el común denominador, luchar por nuestros sueños y trabajar arduamente para ir alcanzando nuestras metas y es hoy este el tema central; ¿Tenemos objetivos? ¿vivimos por vivir o estamos trabajando en nuestros sueños? Los propósitos de año nuevo son muy comunes, escuchar a la gente diciendo que en enero bajará de peso, ganará más dinero, comerá mejor o dejará de fumar es algo muy típico pero ¿qué pasó con nuestras metas del año pasado? ¿las cumplimos o las dejamos atrás? Debemos hacer una fuerte introspección y saber qué es lo que queríamos y dónde estamos ahora; Muchas veces no tenemos ningún propósito y no se cómo se vive de esa manera, sin ningún sueño, sin una esperanza, no se verdaderamente qué se siente.
La mayoría de las personas viven por vivir, no se apasionan, no crean, no buscan algo diferente a lo que les fue enseñado y no se preguntan qué es lo que aman, lo que les gusta. La gente en general pulula sin sueños, sin esperanzas. No confía en su infinito poder ni en sus ganas de salir adelante, buscamos lo cómodo y lo seguro, es lo que nos hace sentir superficialmente tranquilos cuando no es así en realidad. Llega un punto en tu vida que ya no buscas lo de siempre, no le temes a lo desconocido y arriesgas todo por una causa. Uno de los propósitos de año nuevo que para mi es crucial es arriesgar, dejar de tener miedo, confiar en ti, en tus decisiones, en tus acciones, nada tienes que perder y si pierdes seguro al día siguiente ganarás más de lo que se te quitó el día anterior. Nos enseñaron a hacer lo que ya todos hicieron, a seguir el ejemplo, cuando hacemos algo diferente o a menos algo con lo que soñamos eso nos hace sentirnos dichosos, nos hace ser más maduros y estar satisfechos con nosotros mismos; Todo dependerá según lo que te haga sentir vivo y lo que te haga feliz pero en general pienso que las aventuras y las grandes experiencias son las que nos hacen tener una vida que volteemos a verla y nos sintamos orgullosos de ella.
Debemos trabajar en nosotros mismos, pulirnos, mirarnos en el espejo y preguntarnos ¿qué es lo que queremos? ¿qué esperamos? Y ¿hacía dónde vamos? Es fascinante dejarnos sorprender por la vida pero es mágico sorprenderla nosotros. No dejes tus sueños a un lado, no dejes de creer, de confiar, no te pongas límites, ellos no existen, tu los creas, debemos aprender a eliminarlos y saber que podemos llegar hasta dónde nosotros queramos. Confía en tu perfecta capacidad para construir lo que siempre has soñado.
El primer y más grande propósito que yo me fijaría para este año es creer en mis habilidades, confiar en mis capacidades, creer que puedo, buscar mis sueños, encontrar mi pasión, crear la vida que quiero tener; Sirve agarrar revistas para recortar las situaciones en las cuáles nos queremos encontrar, plasmarlas en papel para visualizarlas todos los días, escribir nuestras metas a corto, mediano y largo plazo. Seguir soñando, seguir construyendo y buscando las cosas y situaciones que nos llenan de vida, que nos hacen felices. Empaparnos de información funcional para nuestras metas, rodearnos de personas positivas, llenas de pasión que te inspiren y te alienten.
El segundo es buscar lo que quiero, lo que me apasiona y lo que me llena de vida, no quedarme estancado en un lugar, trabajar día a día, darme el tiempo para hacer lo que más me gusta y me pueda llenar, ya sea una clase de yoga, un curso de literatura, empezar a trabajar en ese proyecto personal que siempre hemos querido, jamás dejar para mañana lo que hoy ya traemos en mente. Confiando en nuestro talento como primer punto y segundo trabajando en él, nos vamos a ir acercando a nuestra meta para después poder cumplir otras tantas.
Mi tercera meta es preguntarme día a día si estoy en dónde quiero estar, cómo me siento y en qué aspecto puedo mejorar. Esto no quiere decir que deba todos los días estar atormentándome con preguntas incómodas hacia mi persona, sino que será un auto conocimiento diario para saber si realmente estoy feliz y me estoy acercando a lo que siempre he querido. Nunca dejas de conocerte, de sorprenderte, un universo entero vive dentro de ti, jamás te abandones, jamás dejes de conocerte que tu grandeza es infinita e inmarcesible.
Como cuarto propósito pondría yo experimentar siempre algo nuevo; Probar un nuevo platillo, conocer un nuevo país, hablar con una persona que no conozca, leer un libro distinto, descubrir nuevos métodos para trabajar, cocinar algo diferente a lo acostumbrado y tal vez aprender alguna disciplina. Esto con el fin de estar en constante movimiento y jamás dejar de motivarme y fascinarme. El ser curioso, el querer aprender siempre algo nuevo nos convierte en personas asertivas y de mentes abiertas.
No te limites, no te prives, no te apagues, el presente es un instante, hasta este punto la vida es solo una pues lo desconocido no es seguro y lo pasado ya no existe. Vive cada día intensamente, vívelo sonriendo, sintiéndote vivo; Disfrutando cada etapa de tu cuerpo, de tu vida, brilla cada instante, cada segundo, siente como tu piel se enchina con el viento, como tus ojos se maravillan con esas pequeñas grandes cosas. Cree en ti y en tu inmenso poder de creación, de innovación, de flexibilidad ante cualquier situación que se te pueda presentar. Deja fluir cada experiencia, cada momento y jamás dejes de ser tú. Canta, baila, ríe, sé, confía y cree. Ten fe. –Diego De la Torre